Madrid, martes 18 de diciembre de 2018
Se inicia el primer grupo operativo de agrocompostaje de Madrid
El grupo operativo CAM Agrocomposta propone una metodología que incide en la descentralización de la gestión de la fracción orgánica de los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) en la Comunidad de Madrid. Un modelo de gestión de la materia orgánica que proporciona mayor calidad del producto final, menores costes y menor incidencia en términos de emisiones y balances de GEI. Los promotores del proyecto buscan un cambio de paradigma en la gestión de residuos orgánicos urbanos soportada por una argumentación técnica y económica que acredite la validez de este modelo de gestión y facilite la información necesaria para superar las posibles resistencias al cambio.
El pasado viernes 14 de diciembre se presentó en el centro de coworking de Venturada el proyecto CAM Agrocomposta, un Grupo Operativo que dirige IMIDRA dentro del Plan de Desarrollo Rural 2014-2020 de la Comunidad de Madrid, y de las líneas de cooperación de la European Innovation Partnership.
Son socios del proyecto la asociación AUPA de pequeños productores agroecológicos, la red de Municipios Agroecológicos TERRAE, la Mancomunidad de residuos Valle de Lozoya y los municipios de Alcalá, Móstoles y El Boalo-Cerceda-Mataelpino. La Asociación Economías BioRegionales es la entidad representante del proyecto y «agente de innovación» que, entre otros proyectos de agrocompostaje, ha diseñado y coordina los del Ayuntamiento de Madrid, la mancomunidad Vega de Henares, y ha formado y asesorado en diferentes municipios de toda España.
En esta presentación, en la que además participaron 4 de las fincas-huertas previstas como lugares experimentales de tratamiento a pequeña escala de materia orgánica (hasta 50 t/año) mediante agrocompostaje, se consideraron varias escalas de incidencia de este proyecto. En primer lugar la necesidad de que en la normativa de gestores de residuos se tenga un tratamiento diferenciado a las pequeñas fincas agrícolas que necesitan aportar compost a sus suelos, diferente a los requerimientos de las grandes plantas de tratamiento.
Descentralización de la gestión de la materia orgánica
La metodología que propone el proyecto incide en la descentralización de la gestión de la fracción orgánica de los Residuos Sólidos Urbanos (RSU), modelo distinto al actual que defiende una gestión centralizada a través de grandes centros de tratamiento en la Comunidad de Madrid.
Se pretende demostrar que este modelo proporciona mayor calidad del producto final, menores costes y menor incidencia en términos de emisiones y balances de GEI. Los promotores del proyecto buscan un cambio de paradigma en la gestión de residuos orgánicos urbanos soportada por una argumentación técnica y económica que acredite la validez de este modelo de gestión y facilite la información necesaria para superar las posibles resistencias al cambio.
Por otro lado es objetivo de este grupo incidir en una normativa específica de compostaje comunitario y agrocompostaje en la Comunidad de Madrid, y mantener una línea de trabajo temática con el Ministerio y otras comunidades autónomas para abrir un marco legal nuevo y favorable a los sistemas de compostaje descentralizado, similar a los que ya existen en Francia, Austria, Alemania o Bélgica.
En el año 2019 este Grupo Operativo tiene previsto abrirse como Red de Comunidades Agrocompostadoras de Madrid, a otros municipios ofreciéndoles asesoría en el diseño de sus propios sistemas de recogida y tratamiento descentralizado, especialmente contando con los agricultores de proximidad, con una gestión más inteligente y eficiente (smart) de los ciclos de la materia orgánica, y mostrando la opción más efectiva de economía circular: «alimentar a la tierra (agrícola) que nos alimenta».
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